En la situación en la que el área potencial de impacto de los mitílidos se remite a los 200m de la costa (Escenario 1), los impactos de estos organismos sobre el ecosistema serían considerables. El sistema se encontraría en un desbalance trófico en que la transferencia de energía se canaliza casi íntegramente a través de los mitílidos, generándose una cadena trófica corta del tipo materia orgánica→ cultivo→ detritus → bentos. Esto implica que no habría un excedente de energía disponible para ser transferida a hacia otros niveles tróficos. Además se observa una fuerte disminución de organismos zooplanctónicos, que son presa de las principales especies de peces en la zona.

Fig. 3. Densidad máxima de peces (kg m-3) estimada en función del parámetro ambiental crítico (eje x) y de la orientación de los centros de cultivo con respecto a la corriente dominante en cada sub-cuenca del Estuario Reloncaví (eje y). Las áreas sin datos en los paneles de Cochamó indican el rango de orientaciones con respecto a la corriente en que según el criterio de oxígeno de fondo no debiera haber peces de cultivo en el agua.

 

Estudios de capacidad de carga con aplicación directa a la mitilicultura (contacto: cgiesecke@udec.cl  

Se determinó el estado del ecosistema expuesto a la producción actual de mitílidos realizando tres simulaciones de balance ecotrófico de las comunidades presentes en el fiordo de Reloncaví las cuales incluyeron:

1.-  Modelo  ecotrófico que excluye del sistema a los mitílidos en su rol de consumidores de detritus y fitoplancton


2.-  Estado del ecosistema usando información de CIMAR Fiordos 12 y FIP- Reloncaví, considerando un área de impacto de los mitílidos de 220m fuera de la costa (Escenario 1)

3.-       Estado del ecosistema usando información de CIMAR Fiordos 12 y FIP- Reloncaví, considerando un área de impacto equivalente a la superficie total del fiordo (Escenario 2)

 

Los resultados indicaron que al excluir a los mitílidos del sistema existiría un incremento en la disponibilidad de fitoplancton y seston para detritívoros y consumidores primarios, potenciándose así el desarrollo de la trama trófica pelágica, principalmente a través de consumidores como copépodos, eufausidos, y algunos peces pelágicos.

Por otro lado se observa un aumento en la comunidad de pequeños heterótrofos (micro y nanoheterótrofos) y bacterias que podrían afectar a los cultivos como fuente de enfermedades y vía para la proliferación de organismos potencialmente tóxicos. 

En las simulaciones que consideraron una distribución homogénea de los cultivos de mitílidos sobre toda la superficie del fiordo (Escenario 2), el impacto esperado sobre el ecosistema fue bajo, con una baja competencia por recursos (fitoplancton y detritus). Esto implica que la biomasa de mitílidos podría aumentar hasta en un 65% sin que se registren impactos perceptibles en el ecosistema.

Estos resultados dejan de manifiesto la importancia de definir el área efectiva sobre la cual los mitílidos tendrán algún impacto sobre el medio ambiente.